Al llegar hace unos días a TKB me encontré a mi pobre nueva planta así:
Y claro tuve que pensar una forma que durante el fin de semana no se quede tan pocha, el sábado estaba fresca como una lechuga y en menos de día y medio la pobre estaba mustia.
Así que busqué diferentes formas para tener las plantas regadas, y la más sencilla me pareció la siguiente:
- Cogemos un botella de plástico y la llenamos de agua.
- Le hacemos un pequeño agujero al tapón de la botella
- Regamos la maceta para que así no empiece a absorber el agua desde el primer momento.
- Posteriormente introducimos la botella hacia abajo (como se ve en la imagen) para que así teniendo en cuenta las necesidades de cada planta ellas vayan absorbiendo el agua.
¿Qué te parece? Este truco lo puedes usar para cuando te vayas unos días de vacaciones ¡¡Seguro que tus plantas te lo agradecerán!!